







Tenga a la mano algunos condones, un poco de lubricante y prepare un ambiente que caldée los ánimos. Si la creatividad alcanza (y el dinerillo también) puede inventarse algunos elementos escenográficos (los "glory holes" son un agregado perfecto) llene el piso de alfombras y cojines, y deje que la noche se caliente sola...
Le garantizo que van a tener una fiestica navideña inolvidable; y lo mejor de todo, es que nadie necesitará comprar regalitos para el intercambio. Lo deseable es que los traigan puestos...
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