jueves, 24 de diciembre de 2009

¡FELIZ NAVIDAD!

Ha llegado, de nuevo, el momento mágico del año: La ocasión para reencontrarnos, agradecer, comer bien y aprovechar para preparar la despedida de un año, que trajo para cada quien lo suyo. Ocasión feliz para reconocer nuestros aciertos, errores, felicidades e infelicidades. Ha llegado, por fin, una nueva Navidad y no quiero dejarla pasar sin desear para todos ustedes la máxima dicha de este mundo, manifestada en prosperidad, salud, belleza, sexo, momentos buenos y no tanto, aprendizaje y crecimiento.
También quiero darles las gracias, desde el afecto más genuino, pues es el afecto anónimo: Ustedes me han obligado a continuar con este blog, que nació sin pretensión alguna, hace pocos meses, y ya suma casi quince mil visitas. Si no fuera por eso, es decir, por su lealtad, me habría cansado de mantenerlo hace tiempo.
Espero que nuestra relación crezca, que el Niño Jesús me traiga más seguidores, más lectores y más comentarios. Eso sería realmente maravilloso; después de todo, lo que uno hace en esta vida, lo hace para que alguien lo quiera un poquito a uno.
¡¡¡GRACIAS LECTORES QUERIDOS Y UNA MUY FELIZ NAVIDAD!!!









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