Es uno de los instantes más ricos y efímeros. Acabar, llegar, correrse, irse, terminar...todos nombres que esconden una misma cosa: nuestros orgasmos. El momento de la verdad, el final de un rato en el que otros fluidos nos preparan para este chorro final.Es uno de mis grandes fetiches: ver el torrente de un hombre desbordarse sobre mí y tener la posibilidad de saborearlo. Es fácil entender porque lo llamamos "leche".
Creánme, no es solamente por el color...
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