Muy bien lo dice el dicho, "caras vemos, corazones no sabemos" y eso es cierto la mayoría de las veces; poca, muy poca gente puede adivinar lo que esconde una cara bonita, y yo me atrevo a decir que - lamentablemente - en el caso de los hombres eso es mucho mas cierto. No quiero filosofar, que no se trata de eso, pero, es verdad que los hombres somos bastante buenos en eso de esconder sentimientos y ocultar verdades, tal vez no por ninguna cosa mala, solo porque así somos. Ni más ni menos y claro, cuando son así de guapos, pues corremos el riesgo de dejarnos guiar solo para tanta guapura y perder de vista lo demás; aunque, viéndolo bien, si el que amanece en la cama de uno se gasta ese rostro y esa es la primera visión que te agarra al despertar...¿Quién se atrevería a buscar lo que no se le ha perdido?
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