lunes, 22 de junio de 2009

¿Salir?

Recientemente, un amigo muy cercano llegó a mi casa completamente deprimido por la andanada de insultos con que su padre, un humilde trabajador venezolano, había recibido su confesión de homosexualidad.
El cuadro no pudo ser peor: El papá de mi amigo encontró ciertas cartas y lo enfrentó y él, en un acto ciego de valentía, lo contó todo, para furia y vergüenza del padre ofendido. Un buen hombre, por lo demás.
La franqueza de mi amigo era innecesaria en ese momento de su vida. Salir del clóset, requiere que hayamos aprendido a vivir con naturalidad una sexualidad desprovista de culpas y hayamos alcanzado un nivel de independencia económica y emocional sustentable y duradera. Tener una vida propia, rica y enriquecedora, como hijo, hermano o miembro de la sociedad, hará que tus padres lo piensen antes de venir a juzgarte demasiado agriamente, cuando se enteren que Pedrito en realidad es el hombre que duerme en tu cama todas las noches. Ningún hijo negro se levanta de la cama un domingo y se sienta a desayunar con sus padres para anunciarles que es negro. Pues bien, ningún hijo gay debería anunciarle a sus padres que es gay, a menos que de eso dependa la salvación de su alma. Después de todo, a los padres lo que realmente les preocupa es que uno no sea la repetición del estereotipo con que nos han embromado la vida a todos los homosexuales. Entonces, tal vez sea prudente mantenerse alejado de tales estereotipos y crecer, entendiendo que en las relaciones con los padres hay límites, que no implican necesariamente una mentira. Implican respeto a la vida privada de cada quien y comprensión que se derive de lo que uno hizo con su vida, a pesar de, o tal vez porque escogió el camino de la homosexualidad. Salir del clóset puede ser el más traumático o el más feliz de tus momentos. Eso dependerá de lo que hayas hecho con tu vida.

1 comentario:

  1. Buenas buenas! Llegando tarde a la invitación, como ves... jeje... Te había dicho en CcsMS que comentaría, pero no había tenido la oportunidad.
    Muy acertado el post, por cierto. Sobre todo la frase en la que destacas que por ser distinto a tus padres tengas que decírselo como si hubieses matado a alguien! Estoy muy de acuerdo contigo en esto. Y bueno, leí otras entradas y no sabes como me pusiste jajaja... Espero que tengas chance de pasearte por mi blog un dia de estos. Un abrazo, mucha suerte papa!

    E. Snake

    ResponderEliminar