Uno de los grandes atractivos de un hombre bien formado es el lento despojarse de sus ropas...ese instante en que empezamos a verlos en sus calzoncillos, incluso los que son de colores, que a mi particularmente me parecen poco apropiados, pero pasan porque están de moda...es instante es delicioso y si no están de acuerdo, vean esto...
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