No llega a ser mi fetiche preferido, pero está bastante cerca. Adoro unos buenos pies en un hombre. Tanto como unas buenas piernas; pero, los pies me dan cierto morbo. Cierto placer adelantado que me gusta. Si, me gustan los pies robustos, venosos, duros que soportan el diario trajinar de mi hombre...

Ahhhh
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